Los efectos de extraer plantas de los humedales

«Theses areas are worth future conservation efforts, meaning protection from grazing and from other (human) disturbance.»

Dr. Georg Zizka
Goethe-Universität Frankfurt am Main and Senckenberg Research Institute Frankfurt

Los recursos naturales de Rapa Nui son parte de la historia y del desarrollo cultural de su pueblo desde el mismo principio. El fruto de la tierra es lo que permitió el establecimiento de una población sana que prosperó durante siglos y tuvo excedentes que les permitieron no solo sobrevivir en este lugar tan aislado, sino que más que eso, incursionar en quehaceres complejos y demandantes, como la arquitectura ceremonial y la estatuaria.
Materias primas, ornamentos, medicinas, alimentos, pigmentos, y otros productos se obtuvieron gracias a los recursos naturales de esta tierra, gracias a su suelo, sus plantas… y su agua.
Por eso hasta el día de hoy muchas personas buscan plantas nativas silvestres en diversas áreas del Parque Nacional Rapa Nui y las extraen con diversos propósitos.

Un buen ejemplo de reconocer y adaptarse al cambio climático fue la decisión, el año 2016, de no realizar más el Taua Rapa Nui en el Humedal Rano Raraku, debido al impacto de un evento masivo en el entorno frágil del humedal. No fue una decisión sencilla, pero fue necesaria e inevitable.

Sin embargo, llevamos una sequía de 12 años que continuará agravándose a un ritmo sostenido cada año, durante las próximas décadas.
En este escenario, es necesario tomar decisiones y asumir que debemos cambiar algunas prácticas. Hay que adaptarse al cambio climático. Nuestros antepasados también supieron adaptarse a condiciones ambientales cambiantes en la isla y quizás es así como llegaron a crear innovaciones como los jardines de piedra o los manavai.
Hoy día, tenemos más antecedentes y datos sobre el cambio climático y la sequía que llegó a la isla para quedarse. Es urgente que dejemos de extraer plantas nativas del campo, del Parque Nacional Rapa Nui y de nuestros humedales.
Para cualquier planta que necesitemos tenemos opciones sustentables disponibles, como cultivarlas en casa o usar otras materias primas alternativas. Mira estos dos ejemplos aplicables al Humedal Ava Ranga Uka.

Caso: nga’atu (totora, Schoenoplectus californicus)

Durante generaciones la extracción de nga’atu podía hacerse sin muchos impactos en el medio, pero hoy es necesario adaptarse a la actual realidad ambiental.
Aprieta el signo «+» para conocer por qué y cómo evitar la extracción de nga’atu:

Desde el punto de vista de la conservación, el estado de esta especie se consideraba hasta hace 10 años como una preocupación menor, por las poblaciones estables de los humedales.
Sin embargo, se ha identificado el ramoneo de los renuevos de totora por parte del ganado suelto y a ello se suma la sequía y el cambio climático, que perjudican la propagación natural de esta planta acuática. El caso del Humedal Rano Raraku es un claro ejemplo de la dependencia de esta especie de los humedales.

La extracción afecta sobre todo a los humedales, a los que la totora les provee protección del exceso de evaporación. Esto es aún más importante bajo la sequía de 12 años que sufrimos y el cambio climático.
También las faenas de extracción afectan a plantas vulnerables asociadas a la totora en cada humedal y que dependen de ciertas condiciones de sombra y humedad (por ejemplo, en el caso del Humedal Ava Ranga Uka, algunas especies de helechos y sobre todo el tavari, que por lo general crece asociado a la totora).

El uso actual más común y demandante de la totora es la confección de los pora, los flotadores de totora que se usan en competencias de deportes ancestrales. También se confeccionan esteras, bolsos y sombreros artesanales. En la antigüedad tenía variados usos también.

Cultivo en casa. Aquí hay incluso la posibilidad de crear un emprendimiento de producción de totora y satisfacer la demanda actual y la demanda potencial de una materia prima tan útil y multifacética. Hay lugares donde se cultiva totora y en general representa una actividad económica y sin muchas complicaciones, con técnicas sencillas y buenos rendimientos.

Caso: nehenehe (helechos – varias especies)

La mayor parte de las especies de helechos son vulnerables y de propagación lenta, por lo cual extraerlas nunca es una práctica recomendable, mucho menos ahora bajo sequía y cambio climático.
Aprieta el signo «+» para conocer por qué y cómo evitar la extracción de nehenehe:

Varios helechos están en clasificados «Peligro crítico de extinción», mientras que otros se consideran «Vulnerables»

La mayor parte de los helechos son sumamente difíciles de reproducir, incluso aunque se aplique tecnología. Por eso es tan importante mantener protegidas las poblaciones silvestres y sus ecosistemas.
Bajo cambio climático y sequía prolongada la extracción es todavía más perjudicial debido a que los helechos son plantas de ambientes preferentemente húmedos.
Las poblaciones de algunas especies son tan extremas (unos pocos ejemplares) que tan solo sacar 1 planta tiene un impacto enorme en su conservación.

Los helechos los extraen con fines ornamentales diversos (personal, eventos, arreglos florales y otros parecidos).

Hay varias otras plantas que pueden usarse con fines ornamentales en vez de helechos, y que son fáciles de propagar en casa. Incluso en Hanga Roa hay helechos exóticos que se pueden propagar en forma natural en los hogares si se proveen las condiciones apropiadas.

  • ¿Se te ocurren otras opciones sustentables para no extraer nga’atu ni nehenehe silvestres de los humedales?
  • ¿Quiénes piensan que deben tomar la decisión de buscar otras alternativas a la extracción de nuestros recursos naturales?
  • ¿Crees que hay oportunidades por ejemplo para crear emprendimientos que satisfagan de forma sustentable la demanda por materias primas vegetales?

Es urgente que todos…

Salvemos Ava Ranga Uka de la destrucción completa.

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